Los Pilares del Jardín
La Tierra
«Y no olvides que la tierra se deleita al sentir tus pies descalzos y los vientos anhelan jugar con tu cabello»
Khalil Gibran
Cuando nos encargan la construcción de un jardín, casi siempre nos piden un determinado estilo, una especie o planta protagonista, una variedad de cespitosa concreta… A veces, lindes alrededor con setos rectos y sobrios de coníferas pero jamás, nos piden que el jardín tenga un buen suelo, un suelo de calidad.
Un buen suelo será fundamental a la hora de crear un jardín y, allí donde exista un suelo de calidad, la belleza del jardín estará garantizada, así como su salud.
Josep Selga nos decía: “cuando a un niño le pides que dibuje un árbol, dibuja en realidad medio árbol”. Es así, solamente pinta el tronco y la parte aérea, sus ramas y hojas. A veces incluso hay manzanas. Es muy raro que dibuje las raíces bajo la superficie y más raro aún es, que se le explique por qué ha dibujado medio árbol…
Las raíces de las plantas y de los árboles son lo primero que se desarrolla de una semilla. A lo largo de la vida del vegetal, las raíces son las que le van a proporcionar: anclaje, soporte vital de absorción de agua y nutrientes, que van a ser el medio de comunicación simbiótica con bacterias, hongos y otros individuos de su especie. Por tanto, no dibujar las raíces, es no dibujar la esencia misma del árbol.
En este sentido, desde Azul Jardines pensamos que si hubiera que hacer un símil con un ser humano, sería como no dibujar su cabeza, ni su aparato digestivo. Podríamos poner alguna manzana en las manos, pero no serían más que partes de una persona incompleta, del mismo modo que un árbol sin raíces jamás será, ni podrá ser un árbol.
En general, cuando los clientes contactan con Azul Jardines y nos contratan para el cuidado o mantenimiento de un jardín, o para que les diseñemos el jardín de sus sueños, les resulta, relativamente fácil, invertir en lo que se ve, olvidándose sin embargo de la base, que en realidad es lo que le va a dar sustento a todo. En Azul Jardines lo tenemos muy presente: los pilares del jardín están en la tierra, en el suelo. Por eso, nos preocupamos mucho de prepararlo y cuidarlo, para que mantenga y conserve todas sus propiedades naturales.
¿Qué es el suelo?
Es la estructura más importante para que la vida pueda desarrollarse. Es el soporte del reino vegetal y el principal proveedor de los elementos necesarios que van a alimentar a los vegetales.
Un suelo sano es como el sistema digestivo sano, que realiza un proceso de descomposición de los alimentos y los convierte en sustancias asimilables por nuestro organismo. La vida es pura simbiosis de organismos. Dependemos unos de otros y hemos evolucionado todos gracias a estas asociaciones. La naturaleza es colaboración. Tenemos una profunda relación con las bacterias que habitan nuestro aparato digestivo y una buena y saludable presencia de las mismas, dará como resultado un buen funcionamiento de todo nuestro sistema, el cual se verá correctamente abastecido por todas las vitaminas, minerales, aminoácidos y proteínas necesarias tras ingerir los alimentos.
En el suelo de un jardín, los procesos son muy similares. El humus, algo así como el conjunto de nutrientes asimilables en nuestro organismo, es el resultado de la descomposición constante de la materia orgánica presente en el suelo, que disuelve y libera los nutrientes que posteriormente serán absorbidos por las plantas. Este humus es el resultado de un trabajo conjunto de insectos, que darán comienzo al proceso masticando primero, y de microorganismos después (bacterias, hongos, levaduras…) y, por supuesto, del agua, el aire y la temperatura existente. Es el resultado dependiente de un delicado equilibrio entre múltiples factores, que en muchos casos se pueden ver alterados por situaciones o acciones propiciadas por la intervención humana: contaminación, aplicaciones de plaguicidas y herbicidas, uso o mal uso del agua… que influyen, negativamente, en el proceso de formación del suelo.
Por ello, si queremos cuidar la biodiversidad, el uso de los productos químicos tales como pesticidas y herbicidas está totalmente contraindicado, debido a su alta toxicidad para los microorganismos y la fauna responsable del equilibrio de nuestros suelos.
No obstante, este tipo de productos se utilizan por su rápida rentabilidad a corto plazo y, por la respuesta prácticamente inmediata en la eliminación de plagas, enfermedades y adventicias en agricultura y jardinería. Sin embargo, a largo plazo, la eliminación de dichas sustancias puede resultar infinitamente más cara en cantidades aún no cuantificadas… Por no hablar de los problemas de alergias alimentarias, toxicidad de nuestros suelos, agua y aire, pérdida de biodiversidad, etc. que traen consigo.
No es un tema para pasar por alto, merece que pensemos sobre él, ya que puede tener consecuencias importantes… ¿Sabías que algunas de estas sustancias pueden permanecer durante más de diez años sin descomponerse llegando incluso a introducirse en la cadena alimentaria y concentrándose en los tejidos adiposos de animales y personas?
Por eso, en Azul Jardines, dado nuestro compromiso por el cuidado y respeto con el medio ambiente y nuestra apuesta por una jardinería ecológica y respetuosa con el medio natural, utilizamos productos ecológicos, que no atenten contra el medio ni alteren la biodiversidad.
Hemos de proveer un suelo sano para construir un jardín y si tenemos la enorme suerte de tenerlo, favorecer y cuidar el buen desarrollo y continuidad de los ciclos durante las estaciones.
Por eso, en Azul Jardines, cuando diseñamos un jardín, el suelo a emplear va a estar directamente condicionado a las especies que vayamos a implantar en él. Así, un jardín de bajo mantenimiento con predominancia de suculentas y cactáceas, tendrá un suelo más arenoso y drenante y con escasa (¡que no inexistente!), materia orgánica. Sin embargo, un jardín con césped y especies más exigentes en materia orgánica y humedad, requerirá una combinación de tierra vegetal, arena y humus adaptada. En este sentido, nuestros proveedores de tierra vegetal y mantillo, realizan las mezclas necesarias a cada suelo y especie a cultivar. Te ofrecemos la solución personalizada que tu jardín necesita.